Leyenda: 8.
Refugio: un piso en el downtown de San José, California.
Apariencia: 2.
Edad: aproximadamente 39.
Altura: 1,78 m.
Ojos: Negros
Pelo: negro encanecido
Peso: 82 kg.
Peso: 82 kg.
Historia: A base de juntar retazos y fragmentos inconexos, algunos trozos de su vida se pueden reconstruir. Marvin luchó con una unidad de operaciones encubiertas del ejército norteamericano desplegada en algún punto de Oriente Medio. Hacían el trabajo sucio del gobierno, a veces para la CIA u otros intereses, y fue allí donde su madre se le presentó y le indicó su herencia divina. Así que desde entonces combinó un servicio militar cada vez más duro, con su trabajo para su panteón. Teóricamente, formó con John el grupo Front Line, y juntos hicieron gestas.
Estas gestas cambiaron cuando llegaron al desierto, a las ruinas de un antiguo templo babilónico, donde lidiaron con lo que ellos llaman una criatura nemeana. Sin embargo, tras ella se encontraba Gilgamesh, quien reveló la Verdad a Marvin y a John, corrompiéndolos con la semilla de los titanes.
Lo que allí ocurrió afectó dramáticamente a ambos, hasta el extremo de que al poco terminó su enésimo tour en el ejército y no renovaron, regresando a San Jose. Tal impacto tuvo en su vida que su madre, Belona, perdió el rastro y el contacto con su hijo, considerando que se había corrompido y perdido para siempre.
Con el tiempo, John desapareció por completo, y su mente quedó absorbida por el cuerpo de Marvin. O eso dice él cuando cambia de una personalidad a otra, aunque bien podría ser que su amigo hubiese muerto y lo único que queda es la demencia de Marvin que lo cree aún vivo.
Sin embargo, la historia de Marvin llega a su final el día antes del comienzo del silencio de los dioses, a finales de octubre de 2018. Ese día, mientras estaba en su refugio en forma de John, William O'Shea entró por la puerta en la fase final de su plan, cargando en su moto con Ishtar. La diosa destruyó a Marvin sin dejar espacio ni tiempo a la réplica, deshaciendo todos sus poderes y negándole siquiera la voluntad de resistirse a su influjo divino.
Objetivos: aunque muchos creen que su objetivo es ser el único Scion de San Jose, destrozando a todo el que entra, en realidad lo hace solo para proteger a John. Es su principal obsesión, garantizar que su compañero está bien, aunque como nunca nadie lo ha visto, es imposible estar seguros de si realmente existe el Hijo de Atenea, o es solo el producto de la mente destrozada de Marvin.
Según Gilgamesh, Marvin tiene algún papel en sus planes. Y cuando hablas con John, su cuidadosa forma de hablar deja entrever que, en efecto, tiene grandes planes para San José.
Estas gestas cambiaron cuando llegaron al desierto, a las ruinas de un antiguo templo babilónico, donde lidiaron con lo que ellos llaman una criatura nemeana. Sin embargo, tras ella se encontraba Gilgamesh, quien reveló la Verdad a Marvin y a John, corrompiéndolos con la semilla de los titanes.
Lo que allí ocurrió afectó dramáticamente a ambos, hasta el extremo de que al poco terminó su enésimo tour en el ejército y no renovaron, regresando a San Jose. Tal impacto tuvo en su vida que su madre, Belona, perdió el rastro y el contacto con su hijo, considerando que se había corrompido y perdido para siempre.
Con el tiempo, John desapareció por completo, y su mente quedó absorbida por el cuerpo de Marvin. O eso dice él cuando cambia de una personalidad a otra, aunque bien podría ser que su amigo hubiese muerto y lo único que queda es la demencia de Marvin que lo cree aún vivo.
Sin embargo, la historia de Marvin llega a su final el día antes del comienzo del silencio de los dioses, a finales de octubre de 2018. Ese día, mientras estaba en su refugio en forma de John, William O'Shea entró por la puerta en la fase final de su plan, cargando en su moto con Ishtar. La diosa destruyó a Marvin sin dejar espacio ni tiempo a la réplica, deshaciendo todos sus poderes y negándole siquiera la voluntad de resistirse a su influjo divino.
Objetivos: aunque muchos creen que su objetivo es ser el único Scion de San Jose, destrozando a todo el que entra, en realidad lo hace solo para proteger a John. Es su principal obsesión, garantizar que su compañero está bien, aunque como nunca nadie lo ha visto, es imposible estar seguros de si realmente existe el Hijo de Atenea, o es solo el producto de la mente destrozada de Marvin.
Según Gilgamesh, Marvin tiene algún papel en sus planes. Y cuando hablas con John, su cuidadosa forma de hablar deja entrever que, en efecto, tiene grandes planes para San José.
Poderes: Desconocidos, aunque claramente sabe combatir. Ha mencionado que quien quiera su poder tendrá que robar su sangre, y que su poder especial fue obtenido durante su visita al templo babilónico y su conversación con Gilgamesh. Es obvio que posee también numerosas reliquias, cogidas de los cadáveres de los scions a los que ha derrotado.
Gestas pasadas: Marvin ha luchado contra criaturas en los desiertos de Oriente Medio, ha hablado y aprendido de Gilgamesh en persona, y ha vencido a los Scions que le han intentado encontrar. Probablemente tenga más gestas pero, de ser así, aún no ha hablado de ellas.
Personalidad: Huraño, violento, inteligente, desconfiado y paranoico... poca gente ha llegado a hablar con él de todas formas, dado que lo normal es que vaya directamente a destruir a sus enemigos. Pero aquellos que lo han hecho han descubierto una personalidad destrozada por la guerra y lo que ha vivido, profundamente sumida en la soledad y la tristeza. Solamente parece que su preocupación por John le mantiene en el filo de no perderse por completo.
Sin embargo, si se consigue sacar a la luz a John, su personalidad cambia radicalmente a una persona fría, cabal y perfectamente racional, aunque obsesiva con la Verdad que Gilgamesh le ha revelado. No tiene un compás moral como tal, sino que opera en base a lo que cree que beneficiaría a sus objetivos, aunque no necesariamente es particularmente destructivo si no ve amenaza alguna. Y, sin duda, es alguien con quien se puede negociar.
Sin embargo, si se consigue sacar a la luz a John, su personalidad cambia radicalmente a una persona fría, cabal y perfectamente racional, aunque obsesiva con la Verdad que Gilgamesh le ha revelado. No tiene un compás moral como tal, sino que opera en base a lo que cree que beneficiaría a sus objetivos, aunque no necesariamente es particularmente destructivo si no ve amenaza alguna. Y, sin duda, es alguien con quien se puede negociar.
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